La revista alemana Science Spectrum afirma en un artículo que las numerosas rampas pequeñas en los templos griegos antiguos servían a personas con problemas de movilidad.
Muchos templos griegos antiguos tenían rampas de acceso. En la Acrópolis, por ejemplo, había una rampa tenía 80 metros de largo. Los expertos estiman que contribuyeron a facilitar el transporte de mercancías y animales. Sin embargo, en algunos templos, los arqueólogos no están seguros exactamente para qué se utilizaron estas estructuras.
Debby Sneed, de la Universidad de California, Berkeley, dijo a la revista especializada Antiquity, “La antigua Grecia es conocida por sus numerosos templos y santuarios, incluidos varios dedicados a la curación y cultos asociados. Basado en estudios sobre discapacidad, la investigación analiza la arquitectura de los espacios e instalaciones públicas, junto con evidencias epigráficas, iconográficas y literarias, para argumentar que los antiguos griegos buscaban asegurar la accesibilidad de los santuarios curativos. Incluso sin un marco de derechos civiles como los entendemos hoy, los constructores de estos sitios tomaron decisiones arquitectónicas que permitieron a las personas con movilidad reducida acceder a estos espacios”.
El objetivo principal de la rampa era brindar acceso a personas con problemas de movilidad. Porque en la antigua Grecia había muchos ciudadanos con dificultades para caminar, como se puede observar en los jarrones que representan a personas con muletas o prótesis. Los análisis esqueléticos también muestran que en los siglos IV y V a. C. la artritis y los problemas articulares estaban muy extendidos.
Templos con rampas
En consecuencia, la cultura griega es probablemente la primera en tener en cuenta a las personas con discapacidad en el diseño y construcción de edificios importantes. Según la arqueóloga norteamericana, su valoración se sustenta en el hecho de que muchas rampas están ubicadas en templos dedicados a Asclepio, como el de Epidauro, junto al famoso Teatro Antiguo. Además de los pacientes, otras personas con enfermedades reumáticas también visitaban el Asclepeion para orar por su recuperación. La experta Debby Sneed, que vio muchas de esas estructuras, dijo que las rampas servían tanto a los enfermos como a los ancianos.
Sin embargo, el objetivo principal del acceso especial a los templos sigue siendo controvertido. Es posible que fuera solo una moda arquitectónica temporal y localmente restringida, estima la experta en lugares de culto Katia Sporn en la revista científica Science. La experta alemana considera más probable que las rampas simplemente facilitaran el acceso de todos los fieles a los templos y no fueran construidas con ese fin para personas con necesidades especiales. Tal vez el acceso de los discapacitados fue sólo un “beneficio colateral”, concluye Katia Sporn.